Prosimetron

Prosimetron

quarta-feira, 30 de março de 2011

O que uma mulher sofria para estudar


Estava eu a ler La literatura portuguesa en el siglo XIX, estudo literário de D. António Romero Ortiz (Madrid, 1869), quando descobri que Públia Hortênsia de Castro (Vila Viçosa, 1548 – Évora, 1595), uma das figuras femininas de Humanismo português, para sossegar à sua ânsia de aprender se disfarçou de homem assistindo, nessa qualidade, às aulas na Universidade de Coimbra e talvez mesmo, anteriormente, na de Évora.
O mesmo veio a acontecer, no século XVII, com a poetisa sevilhana Doña Feliciana Enriquez de Guzman que “estudió en Salamanca en trage de hombre” (p. 64), imitando ambas as pisadas da Papisa Joana.

A este propósito recorda o autor o Romance medieval:
Juana había por nombre
Una varonil mujer,
La cual en hábitos de hombre
Se puso por más saber,
Llamándose Juan: en letras
Fue infinito trascender
Porque en la ciudad de Atenas
Estudió con su saber.
Aprendió, y supo tanto,
Que vino a Roma à tener
Cátedra donde enseñaba
Muy contenta á su placer,
Y en las públicas disputas
A todos iba á vencer.
Fue de tanta estimación,
Que fue tenida á su ser
Por el más sabio varón
Que Roma pudo tener.
.....
Fue elegida del Concilio
Por Papa acuesta mujer.
....
Y estando puesta en el Trono
Sin castidad mantener
Con un esclavo se echaba
Secreta á más no poder
....
Do cancionero chamado Flor de enamorados
compilado por Juan de Linares, Barcelona, 1573

1 comentário:

Miss Tolstoi disse...

Gostei do "Romance medieval". :)